Se emplaza en una zona aledaña a la estación de trenes de Puerto Varas. Después del término de la llegada del tren a la ciudad tanto la estación como su entorno de convierte en una zona degrada. El proyecto se presenta como una oportunidad de revitalizar el sector.

El edificio se emplaza en un terreno colindante a la línea férrea, junto a una vieja copa de agua de la ciudad. El volumen de cuatro aguas, abstrae la forma vernácula del antiguo granero alemán, replica su morfologías y se adapta al grano del barrio. Además de respetar la altura máxima de 6mts. (más mansarda) establecida por las normas urbanísticas, incorpora la “ordenanza local de fachada” que busca rescatar lenguajes de arquitectura patrimonial.

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El edificio de dos niveles y de plantas libres, genera una inflexión en “su centro” para crear el acceso yse abre hacia calle Decher; repite el gesto hacia su interior y se abre hacia la vieja estación. Eliminado los límites entre lo público y privado … el edificio se convierte en parte del espacio público.

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Un “gran granero”que distribuye su programa interno de forma libre, con un vacío central de doble altura que ordena los usos internos. El edificio revestido en su totalidad en madera negra se funde con su entorno, pareciendo una maestranza de la vieja estación", al mismo tiempo que carente de cierros, elimina los límites, fundiendo el antejardín, áreas verdes y estacionamientos con el espacio público.-